La actividad manufacturera de las pymes descendió 19% anual en mayo y
acumula una retracción de 19,1% en los primeros cinco meses del año
frente al mismo periodo de 2023. Los resultados dan cuenta de un
debilitamiento de la demanda y un deterioro de la situación financiera,
según informó CAME. En la comparación mensual desestacionalizada la
actividad creció 5,3%. También se observó un aumento de 0,2 puntos
porcentuales en el uso de la capacidad instalada respecto al mes
anterior, que igualmente se mantiene en valores bajos (70,3%). Grandes
empresas están poniendo un freno a su actividad para no perder con el
stock.
Por la crisis en la demanda, grandes empresas frenan su actividad para no perder con el stock.