Al vencer el nuevo ultimátum continúa la caótica evacuación, en coche y
a pie, de una población de un millón de habitantes, sin que en ningún
momento hayan cesado los bombardeos. Israel designó dos rutas seguras
para que la población de la parte norte del enclave, poco más de un
millón de personas, se dirijan hacia el sur, en una orden que fue
rechazada por la ONU, ONGs humanitarias y la Unión Europea (UE).
Miles
de personas murieron en seis días de guerra entre Israel y el
movimiento palestino Hamas, que capturó a un centenar de rehenes en una
sorpresiva ofensiva contra el Estado hebreo. El primer ministro Benjamin
Netanyahu pidió a los israelíes prepararse para una guerra "larga y
difícil" y el ejército anunció la próxima evacuación de todos los
habitantes de zonas cercanas a la Franja de Gaza. Washington empezó el
domingo a enviar ayuda militar adicional a Israel, un anuncio que Hamas
equiparó a una "agresión" contra los palestinos.