En ese marco, Kicillof destacó que “lo que se puso de manifiesto fue una
dificultad que lleva décadas y que comenzó cuando se terminaron los
procesos de urbanización del conurbano con criterios de justicia
social”. “En un contexto en que se estigmatizaba a los vecinos y a las
vecinas de Guernica, nos propusimos resolver los problemas de manera
seria y sistemática, iniciando un nuevo modelo de planificación urbana
para la provincia de Buenos Aires”, agregó.
“En todo momento tuvimos
en cuenta que en la toma del predio había familias bonaerenses que
tenían una necesidad debido a la ausencia de un Estado que planificara y
actuara con sensibilidad”, subrayó el Gobernador y expresó: “Después de
resolver la situación inmediata, decidimos abordar los problemas de
fondo respecto de la ausencia de tierra pública en la Provincia”.
“Hicimos cumplir la ley, articulamos con el sector privado y se
destinaron 60 hectáreas para quienes más las necesitan”, explicó
Kicillof. “Pudimos hacerlo en Guernica y lo vamos a hacer en todo el
conurbano: iremos a buscar la tierra para urbanizar lo que haga falta”,
dijo.