La sala 4 del máximo tribunal penal del país revocó el sobreseimiento
por proscripción de delito que había dictado en mayo el Tribunal Oral de
Jujuy en favor de la dirigentes social, que se encuentra detenida por
otra causa, y dispuso que se evaluara si debía ser sometida a un nuevo
juicio.
La decisión de los camaristas Hernán Borinsky, Juan
Carlos Gemignani y Gustavo Hornos se produjo en relación a la causa que
le inició Morales, a raíz de una protesta en la que le arrojaron huevos
en la sede del Consejo Profesional de Ciencias Económicas.
Los jueces
del tribunal de Jujuy -Federico Santiago Díaz, María Alejandra Cataldi y
Mario Héctor Juárez Almaraz- habían declarado "la extinción de la
acción penal por prescripción" del delito de amenazas simples, decisión
que fue cuestionada por la fiscalía y la querella.
En el fallo de
hoy, Casación ordenó que se analice si la dirigente jujeña debe seguir
siendo investigada por el delito de "amenazas coactivas", que reviste
una gravedad superior al de "amenazas simples".
"La vigencia de
la acción penal en autos debe ser evaluada atendiendo a la calificación
más gravosa postulada por la querella", sostuvo el titular de la Sala 4,
Hernan Borinsky, en un voto al que adhirieron sus colegas.
El
día en el que se produjo el episodio por el que fueron denunciados Sala,
María Graciela López y Ramón Gustavo Salvatierra, Morales se encontraba
junto al entonces presidente de la Auditoría General de la Nación
(AGN), Leandro Despouy.
Desde un principio, Morales apuntó su
acusación contra la líder de la Tupac Amaru y contra el entonces
gobierno nacional, aunque según los testimonios recogidos en la causa la
dirigente social no se encontraba en el lugar donde se produjo el
"escrache".
Sala se encuentra detenida desde el 16 de enero
último acusada de "instigación" de una protesta de cooperativistas de
vivienda frente a la Casa de Gobierno de Jujuy. Aunque en esa causa fue
excarcelad, nunca recuperó la libertad porque, desde entonces, se le
abrieron otros procesos penales.