Según la causa abierta por supuesto lavado de activos tras la muerte del
fiscal Nisman, hay un depósito por 150 mil dólares hecho en el 2012 por
Stefanini en una cuenta bancaria del banco Merryl Lynch en Estados
Unidos, cuyo apoderado era Nisman y estaba a nombre de su madre Sara
Garfunkel, de su hermana Sandra Nisman y de un contratado de la UFI
AMIA, Diego Lagomarsino.
Esta causa está a cargo del juez federal
porteño Rodolfo Canicoba Corral, quien citó a declaración indagatoria a
los imputados pero el trámite se suspendió a la espera de la resolución
de una recusación en su contra por parte de las familiares de Nisman.
Nisman
fue encontrado muerto de un tiro en la cabeza en el departamento que
alquilaba en el barrio porteño de Puerto Madero en enero pasado y por el
deceso hay una causa penal todavía abierta y que investiga la fiscal
Viviana Fein.
En tanto, Stefanini (46) es un empresario que vive
en San Fernando, tenía un negocio de venta de cartelería publicitaria y
desapareció el 17 de octubre del año pasado.
De acuerdo a lo que
reconstruyeron los investigadores, primero pasó por un astillero de la
localidad bonaerense de Rincón de Milberg, partido de Tigre, donde se
estaba construyendo un barco y de allí se fue a Vicente López.
Su
auto, un Audi S3 blindado, fue captado por las cámaras de tránsito de
los municipios de San Fernando, Tigre y Vicente López y apareció
abandonado estacionado y abierto en la calle Roca al 2400, de la
localidad de Florida, la misma cuadra donde vive su contador, aunque
allí nunca llegó.
La principal hipótesis de la fiscalía es que se
trató de una desaparición forzosa y los pesquisas investigan al entorno
de Stefanini y especialmente sus negocios paralelos como presunto
financista para identificar a deudores o acreedores que pudieran tener
algún problema con el empresario.
El caso comenzó a ser
investigado por la fiscal Mariela Miozzo de la Unidad Funcional de
Instrucción (UFI) de Delitos conexos a la Trata de Personas y la
Violencia de Género de San Isidro, pero luego cuando la familia comenzó a
ser extorsionada a cambio de información, pasó al fuero federal a manos
del fiscal Domínguez y la jueza federal Sandra Arroyo Salgado.
Incluso,
el caso tuvo como detenido a un hombre que, a través de Facebook, le
pedía dinero o fotos desnuda a la mujer de Stefanini.