La reunión entre Cafiero y Miguel se suma a la ronda de consultas que
abrió el Gobierno para definir la continuidad de las medidas de cuidado
ante la segunda ola de coronavirus que tiene en jaque al sistema
sanitario. El DNU con las últimas restricciones que dispuso Alberto
Fernández vece el próximo viernes.
Pero que Miguel haya aceptado ir
es producto del cambio de actitud del Gobierno porteño. Este lunes, la
realidad de los números pasó por encima el relato en el que Fernán
Quirós sostenía que no había riesgo de colapso del sistema de salud.
El
mismo Cafiero junto a varios ministros intercambió ayer opiniones con
sanitaristas y epidemiólogos, que pidieron aguardar las próximas 72
horas para tener más datos y luego definir cómo será la nueva etapa. Los
especialistas recomendaron en forma unánime que se deben intensificar
los controles para que las medidas que se implementan sean cumplidas.
La
Ciudad se venía mostrando hasta acá reticente a la implementación de
nuevas restricciones. De hecho, la administración porteño casi no
controló el cumplimiento de las medidas dictadas por el gobierno
nacional. Y Horacio Rodríguez Larreta desafió abiertamente a Fernández
al mantener las actividades en las escuelas en contra de la suspensión
de las clases presenciales.
Sin embargo, en los últimos días el
discurso y la actitud de los funcionarios porteños varió. El ministro de
Salud, Fernán Quirós, admitió que si los contagios no bajan habrá que
tomar nuevas medidas porque de lo contrario colapsará el sistema
sanitario. Es lo que vienen advirtiendo desde hace semanas y cada vez
más enfáticamente desde la provincia de Buenos Aires, donde plantean la
necesidad de implementar fuertes restricciones por 15 días para darle un
respiro a los hospitales, que en muchos casos ya están saturados en las
áreas de terapia intensiva en las que se atiende a los pacientes más
graves.
De hecho, en la conferencia de prensa que el gobierno
bonaerense ofrece cada martes, Daniel Gollan celebró el cambio de
actitud de Fernán Quirós: "Ahora que los números son incontrastables,
esperamos que vuelva a haber consenso porque hacen falta más medidas: si
mantenemos las cosas así, el sistema de salud va a colapsar", dijo en
conferencia de prensa junto al jefe de Gabinete Carlos Bianco, quien
también se mostró a favor de volver a coordinar las políticas entre la
Ciudad y la provincia.