“Pueden conseguir subas de 20, 25 o 30%, dependiendo de cada gremio, y
lo que va a pagar el trabajador por el impuesto va a ser más, como lo
que va a pagar en muchas cosas”, definió.
Agregó que es una
cuenta “muy complicada”, pero subrayó que sí la AFIP va a percibir 6 mil
millones de pesos menos, entonces lo que no recauda el Estado va a
manos de los asalariados contemplados en la medida.
"Es imposible decir que van a pagar más cuando va a ser menos”, remarcó el funcionario.
Kicillof
recordó que el impuesto a las Ganancias lo paga sólo 10% de
trabajadores que tiene mayor salario, y que la rebaja, a través de un
nuevo sistema de deducciones, se aplicará a quienes ganaban entre 15.000
y 25.000 pesos en 2013.
“Discutieron y quisieron embarrar, pero
todos van a pagar menos; un salario de 20.000 en ese año va a pagar 30%
menos de impuesto a las Ganancias”, puntualizó.
Además, “como la
medida es retroactiva para todo 2015, lo que se pagó como adelanto se le
va a ir devolviendo (al trabajador) en cinco cuotas sucesivas”.
El
titular del Palacio de Hacienda dejó asimismo abierta la posibilidad de
un próximo ajuste en las Asignaciones Universales por Hijo y por
Embarazo (AUH), al considerar que “todas las prestaciones se van
ajustando cuando lo consideramos más conveniente”.
En lo que
respecta a la discusión salarial, insistió en que “nadie le pone techo a
las paritarias, son libres como fueron siempre: tenemos 1.400 convenios
colectivos y esa es una bandera de nuestro gobierno”.
Tras lo cual enfatizo que esas negociaciones sí deben reflejar la baja de la inflación, "de 10 puntos con respecto a 2014”.
“Quienes
calculaban 40% el año pasado ahora dicen 30; y los que decían 30
bajaron este año a 20%”, dijo el ministro al citar las proyecciones
elaboradas por el economista del Pro Carlos Melconian y de la diputada
Patricia Bullrich, “ahora devenida en consultora de estadísticas”.
Durante
la víspera, el Gobierno nacional formalizó la rebaja del Impuesto a las
Ganancias para los salarios comprendidos entre 15.000 y 25.000 pesos,
beneficio que será retroactivo al 1ro. de enero de este año, y que
contempla la creación de seis subescalas de mínimos no imponibles para
su aplicación.
La norma precisa que si el contribuyente no tenía
trabajo en agosto de 2013 -fecha que se tomará de referencia para fijar
el parámetro de los trabajadores comprendidos en la medida-, se
considerarán los sueldos cobrados en enero de 2015 con iguales montos de
referencia; es decir dentro del rango de 15.000 y 25.000 pesos.
Como
la medida es retroactiva al 1° de enero de 2015, si hay devoluciones
estas se harán en cinco cuotas fijas entre junio y octubre próximo.
En
base a las subescalas fijadas los niveles de reducción contemplan a los
trabajadores que se desempeñan en zona desfavorable, como la Patagonia,
y el resto del país, así como por escala de ingresos.
Las
subescalas serán de 15.000 a 18.000 pesos; desde 18.001 a 21.000; desde
21.001 a 22.000; desde 22.001 a 23.000; desde 23.001 a 24.000; y desde
24.001 a 25.000 pesos.