En ese contexto, el
procedimiento de rigor establece que la Sala designada debe dar vista al
fiscal (que en el caso de la Cámara Federal es sólo uno y es Moldes)
para que dictamine en relación a la apelación -en una resolución que no
es vinculante- y luego expedirse la propia Sala en relación al planteo,
en este caso si finalmente resuelve que la denuncia de Nisman debe ser
investigada o si queda definitivamente desestimada.
La fiscal
nacional en lo Criminal Cristina Caamaño consideró que "como hombre de
bien", el fiscal Germán Moldes "debería inhibirse de la causa". Además,
la fiscal dijo que "algunos de los querellantes podrían recusarlo porque
fue uno de los organizadores de una marcha en contra del Gobierno".
"Moldes
se tendría que apartar porque ya adelantó su opinión", sostuvo Sergio
Burstein de la Agrupación 18J quien también reiteró su acusación al
fiscal por haber sido uno de los que "hizo lo posible por demorar la
causa por el encubrimiento del atentado".
Por su parte, el
legislador del Frente para la Victoria Pablo Kosiner, sumó su
cuestionamiento. "Moldes no plantea hoy ni objetividad ni eficiencia
porque tiene una posición tomada al respecto e incluso fue uno de los
que convocó y participó junto a dirigentes de la oposición de la marcha
del 18F”.
´El diputado Héctor Recalde también se manifestó en el
mimso sentido. "Moldes ha tomado partido, y quien ha tomado partido,
tiene preconceptos que lo llevan a tomar decisiones subjetivas”. dijo.
En
tanto, la diputada nacional Mara Brawer dijo: “Me preocupa mucho que
en este caso, que se ha convertido en un tema político en un año
electoral, tenga que hacer Moldes la presentación", y recordó que el
fiscal es el mismo que "no quiso apelar el sobreseimiento de los
encubridores en la causa AMIA”.
Brawer manifestó además su
“preocupación” por “la partidización de laJusticia y cómo se está
utilizando esta causa” y consideró que “la intencionalidad política es
hacer vivir este tema el mayor tiempo posible en un año electoral”.