“La última comunicación que tuve, no leyó los dos mensajes porque
teóricamente ya había fallecido. Él ya me venía hablando de cuestiones
de miedo, de que iban por él. Él estaba nervioso”, señaló.
Por
otra parte, según trascendió en los medios de comunicación, el 16 de
enero, el fiscal del caso AMIA le envió a su ex mujer, la jueza Sandra
Arroyo Salgado, la tapa de la revista Noticias que esa noche saldría a
la venta. Luego hubo una discusión por WhatsApp en la que la mujer le
recriminó: “Está claro que mis prioridades están en otro lugar, para vos
lo más importante es la puja de poder y salir en diarios, revistas y
tv. Te felicito por haber conseguido lo que querías”.
La
discusión refería al viaje de Nisman con su hija a la Argentina, que no
cumplía con el plan establecido previamente por la ex pareja.
“Ya
te lo explicaré personalmente, no podía no hacerlo. Te mandé copia de
los pasajes. Volvía en cuatro días y seguía todo igual, vos no lo
aceptaste, no quiero hablar más por acá”, respondió Nisman.
Los
mensajes forman parte de la causa que instruye el juez Luis Rodríguez
por amenazas que había recibido Nisman mucho tiempo antes de aparecer
muerto y que Arroyo Salgado aportó el viernes pasado cuando declaró como
testigo, tras recordar que el 17 de enero recibió un ejemplar de la
tapa de la revista Noticias, que llevaba la imagen de Nisman, con un
punto en la cabeza.