Este movimiento especulativo comenzó en el primer trimestre de 2014,
cuando aún continuaban las negociaciones de acercamiento entre la
Argentina y los fondos buitre. En esos encuentros, Aurelius fue un
férreo opositor a cualquier tipo de resolución favorable a las partes.
Según
la última declaración jurada del fondo, realizada el 30 de junio,
todavía tenía el PUT en sus manos, por lo que podría estar esperando
para activarlo; sin embargo, si se activara hoy, el buitre habría
perdido mucho dinero.
El PUT es un derivado financiero que es más
comúnmente conocido como 'opción para vender' un título o una acción.
Si una persona tiene una acción de YPF y la quiere vender en un
determinado plazo de tiempo, por ejemplo el 30 de noviembre de 2014, una
de las posibilidades es hacerse de un PUT de YPF que vence ese día.
Este instrumento genera un derecho a vender la acción a quien lanzó ese
derivado financiero al mercado, al precio establecido en el acuerdo.
Aurelius
compró PUTs de 300 mil acciones de YPF en el primer trimestre del año
por un total de 9,8 millones de dólares, lo que implica un total de
32,68 dólares por acción y 'cuanto menor sea el precio de la acción el
día que el contrato vence, superiores serán las ganancias de Aurelius',
indica el periódico.
El mercado financiero permite esta clase de
especulaciones y estos derivados están regulados por la International
Swaps and Derivatives Association (ISDA), que contiene a un fondo
buitre, Elliot Management, en su comité de decisiones, bajo la premisa
de que la autorregulación de los mercados es posible.
Resulta
difícil argumentar por qué este tipo de derivados que permiten ganar a
costa de las pérdidas de los mercados están autorizados, pero, al igual
que los seguros de default (Credit Default Swaps, también llamados CDS),
tienen un gran volumen de compraventa en las plazas financieras más
importantes.
El último jueves se conoció que Edward Friedman,
abogado de Aurelius, le escribió al juez Griesa que 'Argentina ha
violado descaradamente el desacato'.
Es decir que, quien especula
contra los activos argentinos es el mismo que puede dejar a la
Argentina en default. Los buitres están siendo investigados por la
Segurities and Exchange Commission (SEC) a pedido de la Comisión
Nacional de Valores (CNV), dirigida en su momento por el actual
presidente del Banco Central de la República Argentina, Alejandro
Vanoli, sobre una posible tenencia de CDS, lo cual implica una
manipulación de los mercados. En este negocio, indirectamente se estaría
operando de la misma manera', remarca Tiempo Argentino.
'Sin
embargo, las especulaciones, incluso las de los buitres, pueden salir
mal: las acciones de YPF en el exterior no paran de crecer, y hoy
cotizan a 33,72 dólares, mientras que a principio de febrero el valor
era de 21,85 dólares; pareciera que el supuesto default que quisieron
instaurar no fue tan rentable, después de todo', concluye.